La residencia fiscal ha adquirido en estos últimos años una mayor relevancia, la que se explica porque es la determinación de dicha residencia la que influye direcamente en el régimen tributario aplicable a cada individuo.
Por su parte la necesidad de vivienda y trabajo de miles de extranjeros en estos últimos años ha determinado que la residencia legal también cobre gran relevancia, debido al creciente desplazamiento de personas en busca de países
En el ámbito del Derecho Tributario y en el mundo de los impuestos, en los últimos tiempos, la noción de residencia fiscal ha adquirido un gran significado. Esto se debe a que la determinación de la residencia fiscal, ya sea de una persona física o jurídica, influye directamente en el régimen tributario que les es aplicable.
Por otra parte, la concesión de residencia legal a extranjeros también ha cobrado relevancia debido al creciente desplazamiento de personas en busca de jurisdicciones que ofrezcan un entorno favorable, seguridad o simplemente una mejora en su calidad de vida.
A continuación, se presenta un análisis de los diferentes tipos de residencia (legal y fiscal), destacando la importancia de cada una y los procedimientos para obtenerlas.
¿Cuál es la diferencia entre Residencia Legal y residencia Fiscal?
La residencia legal y la residencia fiscal son conceptos independientes entre sí.
La residencia legal se otorga a extranjeros que desean establecerse en un país, ya sea para llevar a cabo actividades remuneradas o por motivos laborales, fiscales o personales.
Se obtiene a través de un proceso especial en el cual el solicitante debe demostrar el cumplimiento de ciertos requisitos.
Por otro lado, la residencia fiscal es un concepto distinto introducido por la Ley de Reforma Tributaria, Ley No. 18.083 en 2007. Este concepto se introdujo con el propósito de determinar la aplicación del impuesto correspondiente a cada persona.
En este sentido el Impuesto aplicable a los residentes Fiscales es el IRPF (Impuesto a la Renta de las Personas Físicas) mientras que a los no residentes el IRNR (Impuesto a la rente a los no residentes).
¿Cómo se tramita la residencia Fiscal en Uruguay?
Con la entrada en vigor de la Ley No. 18.718 (ley que modifica el nuevo sistema Tributario), y la Ley de Presupuesto No. 18.719, surge en Uruguay el concepto de residencia Fiscal.
Requisitos para sacar la residencia fiscal en Uruguay
Los requisitos para tramitar la residencia fiscal en Uruguay según la normativa vigente son los siguientes:
Permanecer en territorio uruguayo por un período superior a 183 días al año.
Para calcular este período, se deben tener en cuenta las ausencias esporádicas, siempre que no superen los 30 días consecutivos, a menos que el contribuyente pueda demostrar su residencia fiscal en otro país.
En lo que respecta a la permanencia en territorio uruguayo de personas físicas, se contabilizarán todos los días en los que efectivamente estén presentes en el país, sin importar la hora de llegada o salida.
Establecer en territorio nacional el centro principal de sus actividades o de sus intereses económicos o vitales, en cuyo caso no es necesario cumplir con el requisito de los 183 días.
Se asume que el contribuyente tiene sus intereses vitales en el país cuando su cónyuge e hijos menores de edad que dependan de él residen en Uruguay y el cónyuge no está legalmente separado.
La presencia del cónyuge es suficiente si no hay hijos.
En cuanto a los intereses económicos, se considera que se cumplen cuando la persona genera en Uruguay ingresos significativamente mayores en comparación con cualquier otro país, en una comparación país a país. Estos ingresos no deben consistir únicamente en ingresos de inversión, y la actividad generadora de estos ingresos debe llevarse a cabo en Uruguay.»
Residencia fiscal por tenencia de bienes inmuebles y otros
El Decreto No. 330/016, aprobado en octubre de 2016, introdujo una opción para obtener la Residencia Fiscal en Uruguay, que es la de ser propietario de bienes inmuebles ubicados en el territorio nacional o ser accionista de una empresa declarada de Interés Nacional según la Ley No. 16.906, que es la Ley de promoción de inversión.
El decreto establece que una persona se considera que tiene su base de intereses económicos en Uruguay si cumple una de las siguientes condiciones:
- Poseer inversiones en bienes inmuebles en territorio nacional.
- Tener una inversión directa o indirecta en una empresa por un valor superior a 45.000.000 de UI, que abarque actividades o proyectos declarados de interés nacional según la Ley No. 16.906 y su reglamentación.
¿Cuánto hay que invertir en Uruguay para obtener la residencia?
El 11 de junio, se emitió el Decreto No. 163/020 que flexibiliza las condiciones para obtener la residencia fiscal, estableciendo que se considerará que la persona tiene su base de intereses económicos si cumple con los siguientes requisitos de inversión:
- Tiene una inversión en bienes inmuebles en territorio nacional por un valor superior a 3.500.000 UI (aproximadamente USD 380,000) realizada a partir del 1 de julio de 2020. Es necesario que la persona registre una presencia física efectiva en Uruguay durante al menos 60 días en el año civil. Si no se realizan nuevas adquisiciones, se considerará el costo fiscal actualizado de cada inmueble de acuerdo con las normas fiscales de valoración.
- Tiene una inversión en una empresa (directa o indirectamente) por un valor superior a 15.000.000 UI (aproximadamente USD 1.650.000) realizada a partir del 1 de julio de 2020 y genera al menos 15 nuevos empleos a tiempo completo durante el año civil. Estos nuevos empleos deben generarse a partir del 1 de julio de 2020 y no deben ser una disminución de puestos de trabajo en entidades relacionadas.
Rentas del exterior gravadas:
En cuanto a las rentas del exterior gravadas, se incluyen los rendimientos de capital mobiliario obtenidos en el exterior a partir del 1 de enero de 2011, provenientes de depósitos, préstamos y cualquier inversión de capital o crédito. Además, la Ley de Presupuesto también considera gravadas las rentas obtenidas por servicios personales en relación de dependencia prestados fuera del país, siempre que sean para contribuyentes del Impuesto a las Rentas de las Actividades Económicas o del IRPF.
Es importante destacar que esta modificación afecta únicamente al IRPF y, por lo tanto, solo afecta a las personas físicas que sean residentes fiscales en Uruguay.
Rentas exentas de impuestos en Uruguay:
Las ganancias de capital derivadas de la venta de activos financieros en el extranjero no se consideran ingresos de fuente uruguaya y por lo tanto, siguen exentas de impuestos.
Las entidades legales con base en jurisdicciones extranjeras que reciben ingresos de capital del exterior y cuyos accionistas son residentes fiscales uruguayos deben atribuir esos ingresos a sus accionistas en el momento en que los fondos sean recibidos o estén disponibles. Existe la opción de diferir el impuesto al posponer la tributación de los ingresos a través de una empresa residente en Uruguay. La tributación se realiza cuando se distribuyen los dividendos.
Se permite utilizar los impuestos sobre la renta pagados en el extranjero como crédito fiscal contra el Impuesto a la Renta de las Personas Físicas (IRPF).
Opción de tributación para los Extranjeros que tramitan la residencia fiscal en Uruguay:
Las personas físicas que adquieren la residencia fiscal en Uruguay pueden optar por tributar el Impuesto a las Rentas de los No Residentes (IRNR) durante el ejercicio fiscal en el que ocurra el cambio de residencia y durante los cinco años fiscales subsiguientes. Además, este plazo podría extenderse hasta diez años, según una reciente aprobación del Senado.
Esta opción solo puede ser ejercida una vez y se aplica exclusivamente a los ingresos de capital generados en el extranjero. Al elegir esta opción, el nuevo residente fiscal no tendrá que pagar impuestos ni declarar los ingresos obtenidos en el extranjero durante ese período.
Documento que acredita la Residencia Fiscal en Uruguay:
El encargado de emitir la residencia aFiscal en Uruguay es La Dirección General Impositiva (DGI).
Dicho Organismo, emitirá un certificado que acredita la residencia fiscal en Uruguay.
El proceso para obtener este certificado, según lo establecido en la Consulta Nº 5.457, debe realizarse para cada año calendario y variará según la situación particular de cada contribuyente.
Residencia Legal en Uruguay:
¿Qué es la Residencia Legal?
La Residencia Legal es un trámite que permite a los extranjeros, venir a vivir a Uruguay, sin una estadía mínima, poder trabajar legalmente en el país, y la posibilidad de obtener luego de 3 o 5 años la ciudadanía de Uruguay.
Desde fines de 2012, Uruguay ha estado implementando una política de inmigración orientada a atraer a nuevos talentos jóvenes del extranjero. Esta política se ha reflejado en un esfuerzo constante por simplificar y acelerar los trámites de inmigración, que anteriormente podían demorar más de dos años para obtener una residencia legal definitiva.
Si bien los extranjeros gozarán de los mismos derechos laborales que los trabajadores locales, es necesario que previamente cumplan con ciertos trámites obligatorios para la regularización de su situación, uno de ellos ante la Dirección Nacional de Migración, o Ministerio de Relaciones Exteriores.
Posteriormente a ello obtendrán la cédula de identidad a través de la Dirección Nacional de Identificación Civil, que es el documento que les permitirá finalmente ejercer actividades laborales de manera legal en Uruguay.
Regulación para la obtención de la Residencia en Uruguay:
Si bien es un derecho constitucionalmente reconocido el derecho de ingreso y permanencia de los extranjeros a nuestro país, se encuentra limitado el período de residencia máxima en el mismo.
En este sentido se debe establecer una diferencia entre aquellos extranjeros que vienen al país con fines turísticos, o recreación, y aquellos extranjeros que vienen con el fin de asentarse en el país y trabajar, siendo clave para esto conocer la diferencia entre migrantes y no residentes.
Definición de no residentes:
Se considera no residente a cualquier persona extranjera que ingresa a Uruguay sin la intención de quedarse de manera permanente o temporal. Ejemplos de no residentes incluyen turistas, empresarios, artistas y deportistas, entre otros.
Las personas extranjeras en la categoría de «no residente» no tienen permitido realizar ninguna actividad laboral fuera de aquellas específicas de su categoría.
El período máximo de permanencia en Uruguay para personas no residentes es de noventa días, con la posibilidad de una prórroga por noventa días adicionales. Una vez que expira este período, deben justificar su estadía en el país y presentar documentación probatoria, o en su defecto, regresar a su país de origen.
Definición de Migrantes:
Según las leyes vigentes, un migrante es cualquier persona extranjera que ingrese al territorio uruguayo con la intención de establecerse de forma permanente o temporal, y para ello deben solicitar un permiso de residencia y convertirse en residentes.
Asimismo la categoría de residentes se subdivide en dos grupos: residentes permanentes y temporales.
Las personas extranjeras y sus familiares que tramiten el permiso de residencia en Uruguay y cumplen con las regulaciones migratorias vigentes tienen garantizado por el Estado uruguayo el derecho a igualdad de trato en comparación con los ciudadanos nacionales.
Esto incluye el derecho al trabajo, a los beneficios de la seguridad social, la atención médica, la vivienda, la educación, la reunificación familiar, el debido proceso y el acceso a la justicia en igualdad de condiciones con los ciudadanos nacionales.
Sin perjuicio de lo anterior, es importante destacar que la situación irregular en términos migratorios no impide el acceso a la justicia ni la atención médica de los migrantes.
El Estado está obligado a proporcionar información sobre sus derechos, deberes, garantías y obligaciones en relación a su situación migratoria.
Distintas categorías de Residencia:
Definición de residencia:
La residencia es un permiso concedido a un migrante con el propósito de permitirle entrar al territorio nacional con la intención de vivir y establecerse allí durante un período específico o determinable.
Este permiso puede ser otorgado por la Dirección Nacional de Migración, el Ministerio de Relaciones Exteriores (MRREE) o en algunos casos, incluso puede iniciarse en el extranjero a través de los consulados de Uruguay.
Existen varias categorías de residencia, y la elección de una de ellas depende de la duración de la estadía del migrante, su intención de residencia y su nacionalidad.
Las residencias pueden ser otorgadas de manera definitiva o temporal, con ciertas particularidades para ciudadanos de países pertenecientes al Mercosur y otras naciones de América del Sur, así como para aquellos que ingresan al país por un período reducido.
Residencia Legal Definitiva:
Esta categoría de residencia se concede a migrantes que desean establecerse permanentemente en Uruguay.
Los titulares de esta residencia pueden permanecer indefinidamente en el país, siempre y cuando no se ausenten por un período de tiempo superior a tres años o incumplan las condiciones por las cuales se les otorgó la residencia, lo que generalmente se asocia con actividades delictivas.
La entidad competente para otorgar esta residencia suele ser la Dirección Nacional de Migraciones, a excepción de los ciudadanos de países miembros del Mercosur y otras naciones de América del Sur.
Estos pueden obtener la residencia legal definitiva a través del MRREE o los consulados de Uruguay en el extranjero.
El proceso suele ser más sencillo y rápido, con requisitos documentales menos exigentes.
Residencia Temporal:
Esta categoría de residencia se concede a migrantes que tienen la intención de vivir en Uruguay por un período determinado, que es superior a seis meses pero inferior a dos años.
La estancia está relacionada con la realización de una actividad específica durante el período mencionado.
El permiso de residencia temporal puede renovarse una sola vez por uno o dos años, dependiendo de la naturaleza de la actividad.
Si es necesario extender la residencia en el país, se debe solicitar un cambio de categoría a residencia legal definitiva durante los noventa días previos al vencimiento del período.
Este trámite se realiza exclusivamente ante la Dirección Nacional de Migraciones.
Residencia Temporal Mercosur:
Esta variante de la residencia temporal está disponible solo para ciudadanos de los países miembros del Mercosur y otras naciones de América Latina.
Al igual que la residencia temporal, tiene una duración máxima de dos años.
Es posible prorrogar esta residencia por un período igual, siempre que se realice el trámite dentro de los noventa días anteriores al vencimiento del plazo.
Aunque originalmente este trámite se realizaba ante la Dirección Nacional de Migraciones, actualmente ha perdido relevancia ya que, bajo las mismas condiciones y a través de un proceso simplificado en el MRREE, es posible obtener la residencia legal definitiva.
Hoja Provisional de Identidad:
Los migrantes que planean quedarse en Uruguay por un período inferior a ciento ochenta días solo deben demostrar ante la Dirección Nacional de Migraciones la actividad que motiva su solicitud y la fecha en que finalizará dicha actividad.
Una vez que se haya verificado esta información, se emitirá un certificado para la obtención del Documento Provisional de Identidad por parte de la Dirección Nacional de Identificación Civil (DNIC).
Residencia Permanente a través del MRREE:
En 2014, se promulgó la Ley No. 19.254 con el propósito de simplificar el proceso de obtención de la residencia permanente en Uruguay.
Esta ley beneficia a cónyuges, convivientes, padres, hermanos y nietos de ciudadanos uruguayos, así como a ciudadanos de países del Mercosur y estados asociados (Argentina, Brasil, Paraguay, Venezuela, Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador, Perú, Guyana y Surinam) que deseen establecer su residencia permanente en el país.
El objetivo principal de esta ley es hacer más accesible la residencia permanente para extranjeros que cumplan con alguno de los criterios mencionados anteriormente.
El proceso para obtener la Residencia Legal Permanente se ha vuelto más simple y rápido.
Se tramita ante el Ministerio de Relaciones Exteriores (MRREE), y no es necesario demostrar ingresos en Uruguay, lo cual marca una diferencia significativa con respecto a la normativa previa.
Esta medida, combinada con las facilidades para obtener la residencia fiscal, hace de Uruguay un destino aún más atractivo para extranjeros.
Requisitos para iniciar la residencia legal definitiva ante el MRREE:
- Documento de Identidad (DNI) o documento con el cual el extranjero ingresó al país.
- Carné de vacunas.
- Certificado negativo de antecedentes judiciales, penales o policiales a nivel nacional en el país de origen y en los países donde haya residido durante los últimos 5 años (obligatorio solo para personas mayores de 18 años).
- Partida de nacimiento para la obtención de la cédula de identidad uruguaya.
Es importante destacar que los documentos mencionados en los puntos 3 y 4 deben estar debidamente apostillados o legalizados.
Esta documentación debe cargarse en línea para agendar la solicitud de residencia y programar la entrevista ante el MRREE.
